jueves, 1 de noviembre de 2007

Cohl iba a todas

15 monumentos históricos ubicados en Antofagasta:todos de la misma época en que nuestra familia tenía a uno de sus preciados hijos radicado en la zona, incrementando el patrimonio y el prestigio de la dinastía polaca. Por la tremenda importancia de este hallazgo y para regocijo de sus herederos, el nombre de cada monumento se ha vinculado a un link directo a internet.Todos ellos serían posible objeto de mayor frecuente visita de Adolf Cohl Nadel. La Aduana marcó el inicio legítimo de su vasto patrimonio , que bien sabemos guardaba en sólidos baúles. Hay 2 sobrinos bis-nietos responsables de la investigación, hasta terminar de atar todos los cabos sueltos.
Relación:

EDIFICIO DE LA ILUSTRE MUNICIPALIDAD DE ANTOFAGASTA
TORRE RELOJ DE ANTOFAGASTA
ADUANA DE ANTOFAGASTA (en foto, además en comentarios hay documento histórico)
AL CENTENARIO DE LA REPUBLICA
JOSÉ SANTOS OSSA
FUNDICIÓN ORCHARD
GOBERNACIÓN MARITIMA ANTOFAGASTA
MUELLE SALITRERO COMPAÑIA MELBOURNE CLARK
PLAZA JOSÉ FRANCISCO VERGARA
ESTACIÓN DE FERROCARRIL ANTOFAGASTA A BOLIVIA
MOLO Y MUELLE DE LA EX COMPAÑIA DE SALITRE DE ANTOFAGASTA actualmente Centro Artesanal ubicado en el terminal pesquero
MUELLE MIRAFLORES actualmente ocupado por el club de Yates de Antofagasta
ESCUELA D 73 (Actualmente Teatro Pedro de la Barra de la Universidad de Antofagasta).
EDIFICIO DEL BANCO MERCANTIL DE BOLIVIA Y COLINDANTE
CUARTEL GENERAL DE BOMBEROS DE ANTOFAGASTA

1 comentario:

Cohl dijo...

ADUANA DE ANTOFAGASTA
Categoría:Monumento Histórico
Ubicación:Balmaceda 2786, esquina Simón Bolívar
Comuna :Antofagasta
Región :De Antofagasta
Decreto :2017 24/10/1972

El edificio de la Aduana de Antofagasta tiene su origen en el tratado firmado entre Chile y Bolivia en 1866, que fijó el límite entre ambos países en el paralelo 24, y que dispuso el reparto en partes iguales de los impuestos provenientes de las empresas guaneras y mineras existentes y por crearse entre los paralelos 23 y 25, que demarcaban la zona en disputa. La aplicación de las cláusulas económicas de este arreglo imponían a Chile la necesidad de contar con un edificio público de calidad. Se decidió emplazarlo en el puerto de Mejillones, centro de la actividad guanera.

La falta de recursos que ofrecía Mejillones para construir un edificio de las características requeridas, y el deseo de hacer una obra de prestancia, llevaron a las autoridades chilenas a encargar la obra a la firma Wetmare y Cía., quien la construyó en Valparaiso, en forma modular. En 1868 se trasladaron las partes prefabricadas al lugar de destino, donde ya se habían construido los cimientos, armándose orientada hacia el mar la llamada Casa de la Intervención Chilena.

Se decidió trasladar la construcción de Mejillones a Antofagasta, luego de que en 1885 una serie de edificios públicos de esta última ciudad, -recién incorporada al territorio chileno luego de la Guerra del Pacífico-, fueran destruidos por un incendio. Antofagasta estaba por entonces en pleno auge salitrero, y el edificio a trasladar se consideraba ya entonces una obra de gran belleza, que daría realce a la ciudad. Se encargó del desarme, traslado y rearme, además de la construcción de los nuevos cimientos, la firma de don Eduardo Orchard, que realizó la tarea en 1888. A partir del año siguiente y hasta 1966 el inmueble albergó la Aduana local.

La Aduana de Antofagasta es un edificio de dos pisos, en forma de U, abierto a un espacio central que constituye el patio de acceso y circulación; del centro de él nace una escalera que se bifurca hacia ambos lados, permitiendo el acceso al segundo piso, que en su totalidad es recorrido por un balcón. El edificio mira al mar. Los cimientos son de piedras de tipo graníticas; el pino oregón es el material de los sobrecimientos, los cielos, los pisos, la escalera de acceso, barandas, escuadras, puertas y ventanas. Los muros están estructurados con pilares y diagonales de pino oregón, y rellenos con tierra arcillosa mezclada con paja. La cubierta es de plancha acanalada de fierro galvanizado.

La Aduana posee características propias del tipo de arquitectura de la costa norte que tuvo su más extensiva manifestación en el puerto de Iquique; se trata de una arquitectura en madera que se distingue por el uso de elementos tales como el balcón, la doble azotea, la balaustrada y las molduras. Este estilo corresponde al que floreció en Estados Unidos a fines del siglo XVIII y durante el siglo XIX, basado en el georgian, y que se extiende a diferentes lugares de América gracias a la inmigración, expresándose en variaciones de acuerdo a las condiciones locales.

En 1976, en virtud de un acuerdo entre el Consejo de Monumentos Nacionales y la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas, el edificio fue restaurado por el especialista Eduardo Muñoz González, pasando a albergar las dependencias del Museo Regional de la Universidad del Norte, y las de la oficina regional del Servicio Nacional de Turismo.